La amistad puede manifestarse en múltiples formas. Una de ellas es compartiendo la charla y el intercambio de pareceres libres, sinceros, respetuoso y en algunas ocasiones milagrosamente hasta sosegados.
Cuando esto se produce “a múltiples bandas”, puede ser una tertulia, institución a la que se le reconoce su origen español.
Si una apresurada aproximación localiza ya una valenciana en 1591, en Oviedo también como en tantos y tantos otros sitios, esta sana costumbre goza de dilatada tradición, y ya se encuentran documentadas las famosas de la celda del P. Feijoo a partir de 1721.
Sin documentación escrita, pero avalada por la sabia tradición oral popular, a la afamada tertulia “Viva D. José” se le atribuyen al menos unos 200 años, habiendo pasado por ella las más preclaras, eruditas y discutidoras cabezas (y el resto del cuerpo también, claro está) de estos y otros muchos pagos.
Especial veneración se guarda al recuerdo del paso por la misma de D. José Ortega y Gasset, lo que parece tener mucho que ver con la denominación actual de la tertulia. No se puede decir lo mismo de otros Pepes y Pepas, cuya cortesía dejó mucho que desear, y que, por no caer en su mismo error, no son citados.
Preñados de generosidad, los afortunados herederos de tan rancia tradición no quieren escatimar al resto de la humanidad todo el goce alcanzado en sus reuniones. Por ello, aprovechando la magia que significan las modernas tecnologías de la comunicación, quieren ampliar de un modo virtual los límites de su siempre acogedor cenáculo urbi et orbi.
Estáis pues invitados a encontrarnos en el ciberespacio. Las normas son muy sencillas: prolongaremos el intercambio de pareceres sobre los temas abordados en las reuniones presenciales, o sobre todos aquellos que cualquier cibertertuliano quiera plantear, con los únicos límites que marca la caballerosidad.
¡Bienvenidos, y que la reunión continúe!.
Fdo.: El Avisador.
Cuando esto se produce “a múltiples bandas”, puede ser una tertulia, institución a la que se le reconoce su origen español.
Si una apresurada aproximación localiza ya una valenciana en 1591, en Oviedo también como en tantos y tantos otros sitios, esta sana costumbre goza de dilatada tradición, y ya se encuentran documentadas las famosas de la celda del P. Feijoo a partir de 1721.
Sin documentación escrita, pero avalada por la sabia tradición oral popular, a la afamada tertulia “Viva D. José” se le atribuyen al menos unos 200 años, habiendo pasado por ella las más preclaras, eruditas y discutidoras cabezas (y el resto del cuerpo también, claro está) de estos y otros muchos pagos.
Especial veneración se guarda al recuerdo del paso por la misma de D. José Ortega y Gasset, lo que parece tener mucho que ver con la denominación actual de la tertulia. No se puede decir lo mismo de otros Pepes y Pepas, cuya cortesía dejó mucho que desear, y que, por no caer en su mismo error, no son citados.
Preñados de generosidad, los afortunados herederos de tan rancia tradición no quieren escatimar al resto de la humanidad todo el goce alcanzado en sus reuniones. Por ello, aprovechando la magia que significan las modernas tecnologías de la comunicación, quieren ampliar de un modo virtual los límites de su siempre acogedor cenáculo urbi et orbi.
Estáis pues invitados a encontrarnos en el ciberespacio. Las normas son muy sencillas: prolongaremos el intercambio de pareceres sobre los temas abordados en las reuniones presenciales, o sobre todos aquellos que cualquier cibertertuliano quiera plantear, con los únicos límites que marca la caballerosidad.
¡Bienvenidos, y que la reunión continúe!.
Fdo.: El Avisador.
Querido Alfonso, acabo de enterarme de ésta excelente buena nueva.
ResponderEliminarEnhorabuena por tu perseverancia y tesón, ésto va a funcionar muy bien, debe de comenzar poco a poco algo parecido a ese gran globo que Cajastur "saca" de vez en cuando a volar por la Ciudad y comienza silencioso con la mayor suavidad pero asciende milagrosamente a alturas importantes y viajes hermosos.
Ese es mi deseo.
Pero quiero aportar algo, ahora mismo, porque una sonrisa y buenos deseos no son suficientes.
Y digo a los amigos de la TERTULIA:
El mundo de los blogs es una maravilla, solamente necesita vuestra participación....leer, escribir.
Todos sabeís lo ocurrido en Cuba con Orlando Zapata Tamayo, otra vez la tragedia se ensaña con el hermoso Pais caribeño, pero lo que no sé si sabeís es que una de las 100 personas más influyentes del mundo según la revista Time y que pertence a la "GENERACION Y", se llama Yoani Sanchez y tiene un Blog que ahora se lee con dificultades porque está censurado por la autoridades cubanas, es www.desdecuba.com/generacion y, acceder, acceder y leer, para conocer otra realidad de nuestro mundo.
Éste mundo que nos ha tocado vivir y cada vez se entiende menos.
Pero cada vez las fronteras y las limitaciones son más de "papel" aunque puedan matar y destrozar a seres humanos como nosotros.
Leer y comentar si os apetece, pero sin preocupaciones especiales, ésto es conocimiento,porque por ejemplo el Blog de Yoani ya tiene dias con más de 4000 entradas, que no está nada mal.
Ahora.....¡¡¡¡VIVA DON JOSÉ!!!
Rafael Secades
Buenos días ilustrísimos ciudadanos, respetados amigos y añorados contertulios. Hace meses de mi ausencia por causas imprevisibles que siempre me impiden compartir con vosotros mesa y mantel en las últimas citas.
ResponderEliminarMe congratula que tras dos siglos de existencia hayamos llegado, por la tenaz y nunca poco ponderada voluntad de Alfonso, al uso de los medios más modernos, partiendo de la imprenta más tradicional. Me refiero a aquella en la que se llegaron a editar los discursos de Ortega y Unamuno. Yo no guardo recuerdo, pero soy conocedor de aquellas madrugadas.
Y agradeciendo a Rafa su siempre solícita disposición a intercambiar cosas e ideas, que tanto le honra, y agradeciendo también a Alfonso sus enseñanzas, quiero compartir con vosotros unos haikus japoneses de Mario Benedetti, el primero como comentario sobre el cubano mundo que llena de puertas el campo abierto del malecón:
"el río avanza
con los cisnes estáticos
y vanidosos"
Y el siguiente para contrarrestar el desánimo general en el que nos tienen inmersos los que creen decidir nuestros destinos y ¡Viva D. José!:
"quién lo diría
los débiles de veras
nunca se rinden"
Con afecto.
Fernando Casielles